
La deflación es un término económico que se refiere a la disminución de los precios de bienes y servicios en una economía durante un tiempo prolongado. Esta a diferencia de la inflación, la deflación es un fenómeno que ha sido menos frecuente y a menudo se ha relacionado con problemas más grandes en la economía, como una recesión económica.
¿Qué es la deflación?
La deflación se refiere al momento en que los precios de bienes y servicios en una economía disminuyen. En otras palabras, esta puede ser descrita como una caída en el nivel general de precios.
La misma por lo general suele ser el resultado de una economía que está experimentando una caída significativa de la demanda, lo que hace que los precios disminuyan. La deflación aguda puede provocar una cadena de efectos económicos, como un aumento del desempleo y una disminución de la inversión empresarial.
¿Cómo se controla la deflación?
Esta es una situación que puede ser un desafío para los gobiernos y los bancos centrales, ya que la disminución de los precios puede provocar una disminución de la demanda y un estancamiento de la economía.
Para controlarla, los gobiernos pueden utilizar una combinación de políticas monetarias y fiscales al igual que cuándo intentan controlar la inflación, aunque de una manera un tanto diferente, a continuación lo veremos.
¿Qué es la política fiscal?
La política fiscal es una herramienta que el gobierno utiliza para estimular la economía en tiempos de deflación. Una política fiscal expansiva, como la reducción de impuestos y el aumento del gasto, puede ayudar a impulsar la demanda agregada de bienes y servicios, lo que puede aumentar los precios.
¿Qué es la política monetaria?
La política monetaria también se utiliza para controlar la deflación. Los bancos centrales pueden reducir las tasas de interés utilizando la política monetaria expansiva.
Una reducción de las tasas de interés puede estimular la economía, incrementar la oferta monetaria y reducir el costo del endeudamiento para los consumidores y las empresas. Si la inflación persiste, los bancos centrales pueden aumentar las tasas de interés para frenar la inflación.
Política fiscal y monetaria durante un período de deflación
Un período de deflación es bastante diferente a un período de inflación, es por eso que durante estas crisis los bancos también usan las políticas fiscales y monetarias para ayudar a cambiar la situación.
Aunque en estos casos el enfoque suele ser diferente, gracias a los cambios que se puedan implementar, se puede controlar el consumo y los gastos para que la economía se pueda estabilizar, algo que llevaría a que haya un equilibrio en todos los aspectos, esto beneficia luego a largo plazo tanto a consumidores, cómo a los propios productores.